La Sala Penal Permanente de la Corte Suprema, presidida por el juez César San Martín, resolvió rechazar el pedido de apelación del expresidente Pedro Castillo, quien solicitaba se anule la detención preliminar en su contra por el presunto delito de rebelión y conspiración. Es así que Castillo Terrones deberá cumplir con los siete días que le impuso el juez Juan Carlos Checkley Soria y que demandaba el Ministerio Público.
El juez San Martín consideró que el delito de rebelión no se da únicamente mediante el alzamiento en armas, sino que pretende quitar autoridad a las instituciones democráticas, a fin de concentrar todo el poder. Además, remarcó que al tratarse de un ilícito de intención sí permite la tentativa. Con respecto a la figura de conspiración, precisó que debe haber coautoría anticipada.
Anteriormente, durante la audiencia, Ronald Atencio y Raúl Noblecilla, abogados del exmandatario, argumentaron que su defendido no habría cometido los delitos que se le imputan, pues para que se configure el ilícito de rebelión es necesaria la participación de varias personas y que, además, se alcen en armas. Los juristas precisaron que estos supuestos no ocurrieron y aseguraron que el exmandatario no tenía intención de asilarse en México. Ello, pese a que el secretario de Relaciones Exteriores de dicho país, Marcelo Ebrard, confirmó que se Castillo Terrones había ratificado su solicitud de asilo.